La mayoría huye de los números al elegir qué carrera estudiar, pero también están aquellos valientes a quienes simplemente “se les dan” y pueden sacarle una gran ventaja al competitivo mundo de los negocios.
Aquí es donde entran los contadores financieros, profesionales con un perfil que determina el fracaso o el éxito de una empresa a partir del análisis financiero.
¿Quieres saber si en esta carrera está tu futuro profesional? Encontrarás la respuesta en este artículo. ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
Presta mucha atención, porque esta carrera te permitirá llegar hasta las entrañas de una empresa, empezando por los estados financieros (Informe de ingresos, gastos y utilidades), para determinar cuáles son las mejores estrategias a efectuar.
Este proceso empieza con el registro de transacciones y su debido análisis, para no pasar por alto algo que pudiera afectar la salud económica de la empresa. Después, se informa sobre los resultados a los directivos, el gobierno y, si la empresa cotiza en bolsa, también a los inversionistas.
Un contador financiero se encarga de tomar decisiones estratégicas para crear valor en la empresa, a través de la gestión de operaciones financieras y contables.
En esta etapa se establecen los principales objetivos a alcanzar y se define la manera en que se irán a gestionar los recursos en el corto, mediano y largo plazo.
Un presupuesto financiero es parte fundamental de la planificación estratégica de una empresa. En este documento se destaca su situación económica durante un período específico, que por lo general tiene una duración de un año. El objetivo es prever los gastos e ingresos para alcanzar las metas al terminar el plazo.
Una vez claro el rumbo, es momento de asignar recursos económicos a las áreas de la empresa donde corresponda. Como podrás darte cuenta, se requiere tener una macro visión del negocio, de modo que cada decisión sea justificable.
A corto plazo, tomar decisiones empresariales informadas y estratégicas que eviten gastos innecesarios, o los reduzcan lo más que sea posible, para lograr un presupuesto eficiente que mejore las ganancias de la empresa.
Mientras que a mediano plazo, el enfoque de planificación consiste en optimizar procesos, ya sean de producción, de venta o similares. Las preguntas más constantes serán: ¿cómo reducir el riesgo financiero?, y ¿qué nuevos proyectos se pueden realizar para crecer y diversificar la oferta de la empresa?
Finalmente, a largo plazo se debe comprobar si los objetivos fueron alcanzados, garantizar que la empresa podrá sostenerse un siguiente periodo, prever los riesgos a futuro y tomar decisiones estratégicas para aumentar el valor, ya que hay una relación directa entre la calidad de los servicios de una empresa y su percepción pública.
Toda empresa está expuesta a riesgos y los más comunes son los de carácter financiero, los del mercado (es decir, de su oferta y demanda), crediticios (no poder cumplir con sus pagos) y hasta operativos (huelgas, máquinas averiadas).
El reto de anticipar todos estos riesgos no es nada sencillo, incluso podemos decir que la previsión financiera es todo un arte en sí mismo. Por ejemplo, podría pasar que los negocios con países extranjeros se vean afectados por un cambio repentino en el valor de su moneda, y por lo tanto, también la empresa.
También podría ser que un producto ampliamente consumido en la actualidad deje de serlo en el futuro, o que la empresa no pueda cobrarle a un cliente porque quebró, o incluso que un desastre natural afecte la cadena de suministros y distribución. La contabilidad financiera trata de identificar esta clase de riesgos.
Al estudiar esta licenciatura, tú decides el mejor rumbo para tu carrera.
Podrás trabajar en empresas privadas de cualquier giro, tipo e industria. Quizá prefieras ser parte de una pequeña empresa para construirla desde abajo, o tal vez elijas formar parte de alguna trasnacional bien establecida.
El gobierno también es una opción viable, ya que sin importar si estás a nivel municipal, estatal o nacional, la administración pública es determinante en la gestión de los impuestos del país, los presupuestos federales y las posibilidades o capacidad para efectuar planes sociales, de infraestructura, salud, y más.
Pero si lo tuyo no es trabajar al interior de una empresa u organización gubernamental, siempre existe la posibilidad de ser un asesor financiero y tener tu propia práctica privada. Sin embargo, ten en cuenta que la calidad de tu asesoría está directamente relacionada con tu experiencia profesional, por lo que probablemente no sea el mejor lugar para empezar tu carrera.
Y una oportunidad laboral más, que suma a tu expertise y madurez profesional, es la docencia. Puedes optar por impartir clase en universidades y escuelas de negocios, o dar capacitaciones a empresas en todos los niveles de negocio.
Si te has convencido de estudiar la licenciatura en Contabilidad Financiera, es momento de que tomes acción y elijas una universidad de primer nivel, con un plan de estudios actualizado, profesores expertos, una plataforma moderna para estudiar en línea, convenios con grandes empresas donde puedas hacer prácticas profesionales y una bolsa de trabajo que haga más fácil obtener tu primer empleo.
Conviértete en un visionario financiero y ¡hazlo UNID!