Seguramente has escuchado hablar sobre los análisis FODA en alguna clase o actividad y sabes que su función es detectar fortalezas, oportunidades, debilidades y amenazas en las organizaciones, pero ¿sabías que esta misma filosofía se puede aplicar en lo personal para alcanzar un mejor desarrollo profesional?
En este artículo queremos ayudarte a realizar tu propio análisis FODA, con el objetivo de que conviertas tus debilidades y amenazas en fortalezas y oportunidades.
Identificar fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas: clave para tu desarrollo
Incluso si dieras por sentado que te conoces a la perfección, analizar tus fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas es un ejercicio de autocrítica que te ayudará a perfeccionarte y crecer en distintos ámbitos.
En lo profesional las fortalezas de una persona pueden evaluarse a través de este método. Para ello, se pueden tomar en cuenta las fortalezas y debilidades como aspectos internos y las oportunidades y amenazas como factores externos.
Fortalezas
Las fortalezas de una persona se refieren a activos que funcionan como diferenciadores en el momento y representan una ventaja respecto a los demás.
Debilidades
Son áreas de oportunidad para el desarrollo personal en un sentido amplio. Se trata de aspectos internos que nos colocan en situación de desventaja respecto al entorno o los competidores.
Oportunidades
Se refiere a factores externos que apoyan el cumplimiento de las metas y objetivos que nos hemos planteado para el crecimiento personal.
Amenazas
Es el análisis de los factores externos que limitan o se contraponen a nuestros propósitos, lo que facilita una toma de decisiones consciente y asertiva.
¿Cómo aprovechar este análisis para tu crecimiento personal?
Partiendo de que las fortalezas y oportunidades son aspectos que conviene mantener, la reflexión deberá orientarse hacia las acciones concretas a realizar para conservar este panorama favorable.
Por ejemplo, el ser excelente en una disciplina no significa que puedas relajarte y poner en pausa la preparación en ese ámbito; por el contrario, es una clara indicación de que actualizar y profundizar tus conocimientos te ayudará a aprovechar las oportunidades de desarrollo personal y profesional disponibles en el área en cuestión, e incluso, a crearlas.
De igual manera, entender el contexto en el que tienes ventajas favorece una toma de decisiones segura y con mejores pronósticos.
Llevando esta explicación a una circunstancia concreta, podríamos poner como ejemplo el caso de un estudiante que se da cuenta de que es bueno en el área de ingeniería y tiene la posibilidad de mudarse a una ciudad industrial para trabajar. De esta manera, identificada la fortaleza y la oportunidad, su investigación a partir del análisis FODA comienza a rendir frutos.
Ahora bien, transformar las debilidades y amenazas en su opuesto es la siguiente parte del proceso. Para lograrlo, hace falta ejercitar la honestidad, objetividad y voluntad para trabajar estas debilidades. Continuando con el caso hipotético, el estudiante de ingeniería podría descubrir que, para ascender en su puesto, debe perfeccionar sus habilidades para trabajar en equipo.
Una vez detectada esta debilidad y luego de trabajarla, se está preparado para enfrentar amenazas como la competencia representada por otros profesionistas que, teniendo las mismas o similares competencias, posean también esta habilidad.
Otra situación en la que un análisis FODA es una herramienta útil es la elección de una carrera, pues la investigación que propone te hará poner en perspectiva tus capacidades reales, para lo cual podrás tomar una mejor decisión.
Así, al tiempo en que te ayudará a ganar claridad, te permitirá vislumbrar las oportunidades y desafíos que conlleva una determinada formación.
Conocer la metodología para realizar un FODA es vital no solo en los contextos de clases o investigaciones, sino también para elegir en qué trabajar o qué carrera estudiar. En UNID preparamos a nuestros estudiantes para el momento de tomar estas decisiones. Acércate ahora y conoce más al respecto.
