Cuando buscas empleo se te pide demostrar los diferentes conocimientos y técnicas que has adquirido a lo largo de tu formación académica, pero existen otras características que los empleadores buscan cada vez más en su fuerza de trabajo: habilidades humanas, mejor conocidas como soft skills.
Son una serie de diferentes aptitudes y habilidades laborales que no puedes demostrar mediante exámenes o certificados, pero que son importantes para que la empresa alcance sus objetivos. Generalmente tienen que ver con rasgos de carácter o personalidad, razón por la que suelen dividirse en tres: habilidades interpersonales, competencias sociales y habilidades metódicas. Entre ellas pueden estar tu capacidad para motivar a los trabajadores, tu forma de socializar y la manera en la que resuelves conflictos.
De acuerdo a un informe de Accenture Strategy, las habilidades humanas reducen la pérdida de empleos por la automatización, debido a que estas tienen un gran peso en la cultura empresarial. Demostrarlas destacará tu perfil frente a otros, aunque el puesto de trabajo requiera conocimientos especializados.
Gestión de conflictos y manejo del estrés: en un ambiente laboral de alta presión es importante saber cómo enfrentar dificultades sin ceder al agotamiento físico y mental, ya que esto evita pérdidas importantes de tiempo y dinero para la empresa.
Gestión del tiempo: saber administrar tus tareas para cumplir tus objetivos eficazmente y en el tiempo establecido, es una habilidad requerida y valorada en cualquier entorno de trabajo, ya que mejora la eficiencia de los procesos.
Trabajo en equipo: sin duda, esta es una de las habilidades profesionales más demandadas en el mundo laboral, ya que, para desarrollar proyectos, resolver conflictos y agilizar tareas, es esencial una buena comunicación entre los colaboradores.
Liderazgo: tus habilidades sociales en el mundo laboral te llevarán lejos, si buscas un puesto de alto rango. Demostrar que tienes la capacidad de dirigir un equipo de manera empática, creativa, con una visión clara y sabes mantenerlos entusiasmados, hará que tus superiores te deleguen tareas de mayor responsabilidad.
Inteligencia emocional: dentro del desarrollo de habilidades profesionales se encuentra la capacidad de controlar y expresar tus emociones. Esto ayuda a comunicarte de manera asertiva, prevenir el estrés, mejorar la toma de decisiones y el rendimiento laboral, reducir la ansiedad y más.
Resiliencia o adaptabilidad al cambio: ser capaz de adaptarte a los cambios te permite enfrentar nuevos retos, mantenerte optimista, aprender y seguir creciendo, lo cual beneficia tu imagen como profesional.
Buscar una universidad que te permita tener un crecimiento humano profesional es importante para volverte competitivo en el mundo empresarial. En la UNID podrás desarrollar aptitudes y habilidades laborales gracias a su Modelo Dual, que combina una parte teórica en el salón de clases y una parte práctica en una empresa. De esta manera experimentarás, desde la etapa de estudiante, los retos de un entorno laboral.
Sin duda, el desarrollo de soft skills le da un valor agregado a tu perfil. La gestión del estrés y conflictos, el buen manejo del tiempo, la capacidad de liderazgo, la inteligencia emocional, entre otras habilidades, son parte importante de tu crecimiento humano profesional, por lo que desarrollarlos desde la formación académica te abrirá grandes oportunidades.