¿Alguna vez has sentido inquietud respecto al futuro de tu carrera profesional? Si la respuesta es positiva, este artículo es para ti.
En la actualidad, los profesionistas enfrentan una serie de desafíos relacionados con la competitividad, el nivel de preparación académica, la adquisición de experiencia y el acceso a oportunidades laborales.
¡No existen fórmulas exactas para alcanzar el éxito laboral! Sin embargo, el camino hacia la evolución profesional puede construirse a través de la educación continua. Es por eso que la carrera universitaria es solo el punto de partida.
A continuación, te explicamos cuál es la importancia de la formación constante, así como las razones por las cuales es primordial que se considere como un medio de desarrollo profesional.
La importancia de la educación continua en el siglo XXI
Se entiende por educación continua a la actividad de permanecer actualizado y en constante preparación académica a través de cursos, talleres y de la realización de maestrías. Asimismo, la asistencia a conferencias y seminarios, son también una alternativa para obtener aprendizaje de valor.
Actualmente, debido a la competitividad dentro del ámbito laboral, los profesionistas requieren de conocimientos especializados, además de mantenerse al corriente con las innovaciones tecnológicas aplicadas al campo en que se trabaje.
En ese sentido, estudiar en la universidad es parte clave del proceso, pero inscribirse en diplomados, planear una maestría o doctorado, seguir una línea de especialización que sea del interés de los egresados y adquirir conocimientos que se integren a su preparación, tal como el estudio de un idioma o del uso de una plataforma, contribuyen a un desarrollo profesional completo.
Aunque los beneficios de la educación continua no se reducen a un grado avanzado de conocimiento académico y la obtención de certificados; entonces, ¿cuáles son esas otras ventajas?
Adaptabilidad en un mundo laboral en constante cambio
Mantenerse al tanto de las tendencias tecnológicas y de información, que frecuentemente están en desarrollo, además de saber cómo aplicarlas en el campo laboral en el que nos desenvolvemos, es parte de ser adaptables en un medio laboral que también se encuentra en constante cambio.
Cabe resaltar también que la construcción de un conocimiento especializado, así como la experiencia en relación a lo que se estudia, significa también un nivel de preparación competente en un mercado laboral amplio, global, y en las nuevas industrias que demandan profesionistas capacitados.
Sumado a lo anterior, existen otros beneficios de llevar la educación más allá de cursar la universidad, relacionados a una destacable preparación para el mundo laboral moderno. Aquí te compartimos algunos de los más importantes:
Red de contactos y oportunidades profesionales
Es cierto que durante la carrera universitaria se pueden establecer relaciones futuras de trabajo, sin embargo, asentar redes de contacto es una actividad que requiere practicarse continuamente, ¿de qué forma?
Dar seguimiento a una profesión, participando en cursos o talleres, y la búsqueda de un posgrado, convienen para acceder a oportunidades laborales mediante la ampliación de redes de contactos que se encuentran en estos espacios prácticos y académicos.
Relevancia de la experiencia profesional
La formación continua de un estudiante permite también que adquiera un grado significativo de experiencia útil y aplicable en un trabajo formal.
Esta adquisición facilita la resolución de problemas, así como la consolidación de una actitud proactiva frente a desafíos del mundo laboral.
Innovación y emprendimiento
La planeación y ejecución de emprendimientos, así como la búsqueda de colaboradores para este, puede iniciar en las aulas y en otros espacios académicos. Estos espacios pueden considerarse como una oportunidad para obtener instrucciones sobre cómo comenzar a emprender.
Formar un proyecto no es tarea sencilla, sin embargo, también existen instituciones educativas que brindan apoyo a los profesionistas emprendedores, facilitando así el desarrollo de ideas.
Contribución a la sociedad y el impacto social
Las ideas innovadoras producen cambios positivos en la sociedad. Apostar por una visión a futuro, apoyada de la continua educación puede contribuir de manera positiva, implementando propuestas a problemas sociales, económicos, etc.
Un ejemplo notable de profesionistas con impacto social es Cristina Junqueira, cofundadora de Nubank, quien luego de egresar como ingeniera industrial y cursar maestrías relacionadas al campo económico, comenzó con el proyecto, hoy considerado el banco digital más importante del mundo.
¡Las posibilidades de crecer son inmensas! El desarrollo profesional no es un camino lineal, sino uno de constante crecimiento y esfuerzos, en el que se busca continuamente el aprendizaje. Cursar desde la carrera profesional hasta la maestría en una institución como UNID es un gran paso para lograr tus sueños, únete ahora y comienza a formarte con valores.